el amor empieza en el centro de cada uno, y se propaga hacia todas las formas del universo

esto significa que el amor que te tienes, es el mismo que los demás te tienen

sólo cuando te quieres, los demás también van a hacerlo, porque el espectro electromagnético, el campo cuántico en el que existes es una respuesta de tu mente vibrante y, por tanto, todo sucede cuánticamente de acuerdo a lo que sientes; si sientes poco aprecio por ti, hasta el punto de molestarte que alguien sin valores, sin principios, te rechace, entonces quien te estas rechazando eres tú

tus emociones, generadas por tu adn, modulan el espectro, sintonizan la realidad como si fuera un programa de radio, y plasman tus creencias ahí fuera

por eso si te quieres, vendrá gente a quererte
¿te amas? entonces no esperes otra cosa que amor

por supuesto, lo mismo sucede cuando no te quieres, cuando te olvidas de ti, cuando te descuidas y te dejas, y confieres más importancia a eso de ahí fuera [que, en realidad, eres tú]

la mayoría de las personas, engañadas por la ilusión de la separación, se desvinculan de lo que viven, se sienten juzgadas, menospreciadas, sólo porque están proyectando lo que piensan de sí mismas sobre los demás

es decir, retroalimentan su pensamiento con lo que manifiestan ahí fuera, así que se meten en un bucle de negación

llega un punto que, incapaces de reconocer sus negaciones y sin saber dónde empezó esa guerra, acaban por culpar al mundo que les rodea 

para comenzar a sanar, lo más importante es reconocer la falta de amor propio como origen de la falta de amor de los demás. no te engañes, no busques excusas: si no te quieren y, sobre todo, te duele, estás dando la razón a esa persona que no te quiere porque, en esencia, la persona que más se debe querer, eres tú

se trata de comprender que todo comienza en tu forma de percibirte, en la identidad que te muestras a ti y a los demás, muchas veces inconsciente, lo cual provoca una respuesta concreta [positiva, si te afirmas; negativa, si te niegas]; por eso, no te esfuerces en adaptarte al mundo. es imposible cambiar las infinitas formas del universo. es imposible convencer a todo el mundo de que te quiera [de hecho, volvería a demostrar que quieres que te quieran por no hacerlo tú]

el trabajo empieza por cambiar la forma única [o la no-forma] que existe en ti. y, entonces, con plena convicción de que puedes cambiar el mundo que te rodea, la frecuencia en la que vives, empieza a amarte, a cuidarte y a disfrutarte

inmediatamente, el mundo lo hará